Tigray, 19 Oct 2021 - “Estábamos en medio de la clase cuando escuchamos disparos de armas y explosiones. Me tuve que calmar para poder verificar que todos mis estudiantes estuvieran sanos y salvos”, recuerda Shewit, ex profesora desplazada por el conflicto en Tigray. Ella es una de los casi 2 millones de personas desplazadas internamente desde que el conflicto estalló en noviembre de 2020.
Madre soltera de cuatro hijos, la “Profesora Shewit”, como los demás la llaman en el sitio de desplazamiento, comparte cuáles fueron sus luchas tras haber huido de su hogar.
“Caminamos durante cinco días para llegar a Shire buscando seguridad. Cuando llegamos, la comunidad de acogida fue muy receptiva y nos invitaron injera (pan chato tradicional) y agua, entre otras cosas. Sin embargo tuvimos que dormir bajo los árboles los primeros días y no contábamos con albergue para guarecernos – yo temía por nuestra seguridad cada vez que lo hacíamos”, relata.
Desde que el conflicto estalló, instalaciones públicas de fácil acceso como las escuelas de la región de Tigray se vieron forzadas a hacer las veces de viviendas de emergencia para las personas desplazadas internamente (IDP por su sigla en inglés) que escapaban del conflicto. El acceso a la región era limitado cuando el conflicto alcanzó su pico máximo, pero cuando las cosas se calmaron un poco, el equipo del Grupo Sectorial de Gestión y Coordinación de Campamentos (CCCM) comenzó a acercarse a los sitios a mediados de abril para comenzar con sus actividades de gestión.
La OIM junto a otros asociados les ha entregado a Shewit y a otras familias en el sitio albergues, artículos no alimentarios y otros tipos de apoyo crucial para su supervivencia. Irónicamente, la ex profesora ahora está viviendo temporalmente en una escuela junto a sus hijos.
A pesar de los drásticos cambios en la situación de su familia, ella se resiste a sufrir por todas estas desgracias. “Estoy muy agradecida por este albergue. La vida no ha sido fácil desde que nos fuimos, pero he aprendido a no dar nada por sentado”, señala Shewit.
Respuesta de la OIM
El programa del CCCM de la OIM presta servicios a las comunidades afectadas por el desplazamiento en tres clases de entornos principales: sitios para personas desplazadas internamente (IDP) incluyendo centros colectivos, sitios planificados, y asentamientos dispersos; personas desplazadas internamente (IDP) que viven en la comunidad; y personas desplazadas internamente retornadas a sus kebeles (distritos) de origen.
A finales de julio de 2021, el CCCM de la OIM estaba brindando su apoyo a 34 sitios para personas desplazadas internamente en la zona norte de Etiopía (2 en Amhara y 32 en Tigray), llegando a más de 97.000 personas desplazadas internamente. El equipo está también trabajando junto a las autoridades municipales para completar la preparación de un gran sitio de reubicación en la ciudad de Mekelle, bajo el nombre Sabacare 4, con una capacidad de alojamiento para aproximadamente 18.000 personas. Esto tal vez permita que algunas de las escuelas que en este momento cumplen la función de sitios para personas desplazadas internamente puedan ser desocupadas, permitiendo de tal modo el retorno de los niños a las aulas.
Cuando el conflicto comenzó a principios de noviembre de 2020, las escuelas ya estaban cerradas y esto facilitó el asentamiento de las personas desplazadas internamente. Para mejorar las condiciones de vida y apoyar la reubicación de tales personas, se emprendió el planeamiento del sitio para asegurar la continuidad de las clases cuando las escuelas reabrieran y las personas desplazadas internamente hubieran sido evacuadas.
“El CCCM apoya a los puntos focales del gobierno para la Gestión de Sitios con el objetivo de mejorar las condiciones de vida de las personas vulnerables como Shewit, además de proveer acceso a servicios para las poblaciones afectadas por medio de la coordinación y de la gestión de la información, del mantenimiento de sitios y su mejoramiento, participación de la comunidad y fortalecimiento institucional”, dice Stiofainin NicÍomhaird, a cargo del Programa CCCM.
“Una respuesta en materia de albergues bien coordinada y planificada, sobre todo para el caso de situaciones de desplazamiento extendido, es esencial para evitar que las poblaciones desplazadas busquen albergue en condiciones inaceptables que podrían llegar a agravar sus vulnerabilidades y riesgos en materia de protección”.
Desde diciembre de 2020, la OIM ha estado respondiendo a las crisis en la región. A través de su programa CCCM presta servicios a las comunidades afectadas por el desplazamiento en sitios para personas desplazadas internamente incluyendo a los centros colectivos, sitios planificados, y asentamientos dispersos; personas desplazadas internamente que viven en la comunidad; y personas desplazadas internamente retornadas a sus distritos de origen.
Para ayudar a mitigar la diseminación de la COVID-19 en sitios de desplazamiento en todo el país – lo cual es especialmente importante en aquellos lugares en donde el distanciamiento social se complica por la cantidad de personas – la OIM ha liderado intensivas campañas de comunicación de riesgos junto a sus contrapartes encargadas del suministro de agua apta para consumo y de servicios de agua, saneamiento e higiene para todos (WASH), además de comités comunitarios que trabajan en el ámbito de la comunidad en su sentido más amplio. Asimismo, la OIM ha estado llevando a cabo mejoramientos del sitio para optimizar la prevención y control de infecciones (IPC por su sigla en inglés). Y algo que también es muy importante es que el CCCM de la OIM ha también brindado su apoyo a las autoridades locales para que las mismas desarrollen a nivel local o a nivel de los woredas, una preparación específica de los sitios ante la COVID-19 y procedimientos operativos estándares (POE) de respuesta en sitios de personas desplazadas internamente.
Gracias a todos estos esfuerzos en sitios de desplazamiento en la región de Tigray, las familias como la de Shewith ya no deben dormir debajo de los árboles. Mientras esperan por una solución más sostenible para poder retornar a sus hogares de manera segura, al menos pueden descansar tranquilas entre cuatro paredes y un techo temporal sobre sus cabezas.
La Respuesta de la OIM en el ámbito de la Coordinación y Gestión de Campamentos en el norte de Etiopía es posible gracias a la financiación de la Oficina de Asistencia Humanitaria de USAID, del CERF de Naciones Unidas, de la Dirección General de Protección Civil y Ayuda Humanitaria Europeas y del Fondo Humanitario de Etiopía.
Puede leer el llamamiento del Grupo Sectorial CCCM aquí.
Esta historia ha sido escrita por Kaye Viray, Funcionario de Prensa de la OIM Etiopía.