Finlandia/Somalia – En un torbellino de cambios y nuevos comienzos, Ifrah Ahmed, a la tierna edad de 12 años, se encontró con el colorido abrazo de un otoño finlandés en septiembre de 1989. Este vibrante nuevo mundo estaba a años luz del caos que había dejado atrás en Somaliland, una región marcada por los conflictos. La novedad de Finlandia ofrecía un lienzo de emoción y adaptación para la joven Ifrah, quien abrazó la cultura y el idioma local con una apertura muy especial propia de la infancia y con gran rapidez se incorporó al tejido social de la comunidad de su pequeña ciudad y a la vez nunca dejó de alimentar los ricos hilos de su herencia somalí.
“Yo adopté la cultura de Finlandia como propia. Uno se adapta fácilmente en la infancia. Me hice de muchos nuevos amigos y aprendí el idioma rápidamente”, recuerda Ifrah.
Transitar el camino de este entorno tan rico la condujo a ser enfermera – una profesión que posteriormente tendría un profundo impacto en su vida.
Después de pulir sus capacidades en varios entornos dedicados a los cuidados de la salud en Finlandia, Ifrah se embarcó en un nuevo capítulo de su vida en Reino Unido, intentando equilibrar sus roles como madre y enfermera. Por motivos laborales la familia tuvo que mudarse a Hargeisa, Somaliland, en 2010, pues su esposo tenía allí una oportunidad de empleo. Retornar fue saltar a lo desconocido, pues ella no tenía vínculos familiares en Somaliland. Pero a pesar de eso, el espíritu de Ifrah, templado por los años que pasó en el exterior, no se amedrentó ante los desafíos que la esperaban al momento de regresar.
El viaje de Ifrah es testimonio del poder de la pericia de la diáspora, en particular, el rol tan influyente de las mujeres, en la reconstrucción de Somalia. A través del Programa Migración para el Desarrollo en África (MIDA-FINNSOM) iniciado por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) con el apoyo del Ministerio de Relaciones Exteriores de Finlandia, Ifrah se unió a más de 200 profesionales de la diáspora en lo relacionado con transferir capacidades cruciales de regreso en Somalia desde 2009. Su participación en el programa ha sido un verdadero hito en la tarea de mejorar los sectores de cuidados de la salud y educación en la nación, ilustrando el valioso aporte del empoderamiento de las mujeres en el marco de estas iniciativas vitales.
En 2013, Ifrah compartió voluntariamente sus capacidades y conocimientos en el Hospital del Grupo Hargeisa, en el que la gran necesidad de cuidados neonatales la impulsó a ponerse en acción. Su subsiguiente participación en MIDA FINNSOM en 2014 fue un punto de inflexión en el área de los cuidados neonatales en el hospital.
“La tasa de mortalidad de los menores era alarmante y la mitad de los recién nacidos perdían la vida porque no había conocimientos adecuados para brindarles apoyo esencial para que pudieran respirar bien”.
Debiendo enfrentar obstáculos sistémicos con recursos muy limitados, los esfuerzos de Ifrah llevaron a una disminución dramática de las tasas de mortalidad infantil, que pasaron de niveles alarmantes por medio de capacitaciones esenciales para brindarles a los menores apoyo para poder respirar adecuadamente – una clara medida del éxito que pone de relieve el efecto dominó de la transferencia de conocimientos dentro de la comunidad dedicada a los cuidados de la salud.
Las contribuciones de Ifrah fueron mucho más que meras cifras; ella inyectó una alta dosis de compasión y cooperación a su trabajo, logrando una armonía entre las prácticas occidentales de cuidados de la salud con las prácticas de Somalia, promoviendo de tal modo una cultura de confianza y excelencia. Su liderazgo y sus prácticas innovadoras como por ejemplo los cuidados maternales canguro y el énfasis en amamantar y mantener hábitos de higiene, han sido instrumentales en cuanto a tender puentes en lo relacionado con las brechas en cuidados de la salud.
Reflexionando acerca de su viaje, Ifrah se siente verdaderamente satisfecha con lo logrado.
“Me siento empoderada al poder devolver a mi gente lo que yo pude aprender en Finlandia y en el Reino Unido. Una de las enfermeras a las cuales capacité expresó una gran gratitud desde el fondo de su corazón, diciendo que ella había podido salvar varias vidas gracias a la capacitación que yo le brindé. Eso me hizo dar cuenta de que realmente habíamos logrado un gran progreso”, reflexiona Ifrah.
Continuando con su misión en el Hospital de Niños de Hargeisa (MAS), en el marco de la última fase de MIDA FINNSOM desde abril de 2023, Ifrah representa el espíritu indomable de la diáspora de Somalia- mujeres que lideran el cambio hacia el desarrollo sostenible en Somalia, impulsadas por su resiliencia, su poder de innovar, y un compromiso inquebrantable con el futuro de su patria.