Campamento de Danyar, Somalia – “En Lower Shabelle teníamos todo lo que necesitábamos. Cuando llegaron las inundaciones, perdimos nuestro hogar. Lo perdimos todo”, cuenta Hibo Yusuf, madre de siete hijos que está viviendo en el Campamento de Danyar en las afueras de Mogadishu, Somalia. Las inundaciones provocadas por lluvias torrenciales arrasaron con sus ingresos. Sin medios para mantener a su familia, Hibo y sus hijos – entre ellos tres hijas – no tuvieron más opción que la de mudarse. Su desplazamiento implicó la pérdida de su hogar, según las propias palabras de Hibo, pero lo que también perdieron completamente fue su privacidad.
Esto ha originado un desafío muy complejo para Hibo y sus hijas sobre una cuestión cuyo debate sigue siendo sumamente difícil en muchas culturas: la higiene menstrual. Las sequías, las inundaciones y otras crisis han llevado a altos niveles de desplazamiento en Somalia; en un contexto que ya era frágil desde mucho antes, las mujeres y las jóvenes como Hibo y sus hijas enfrentan dificultades adicionales con la cuestión de la higiene menstrual, por la falta de acceso a agua limpia y por no tener privacidad.
Desgraciadamente la salud sexual y la higiene femenina son con frecuencia ignoradas en la lista de prioridades de emergencia para las mujeres y jóvenes desplazadas en Somalia, creando una profunda brecha en el acceso a productos de calidad para la higiene menstrual, a agua segura, a sanitarios aptos para los períodos, y educación sobre salud menstrual para Personas Desplazadas Internamente (IDP).
Pero cuando Hibo y sus hijas llegaron a Danyar se sintieron aliviadas al encontrar algunos Servicios de Agua, Saneamiento e Higiene para Todos (WASH) brindados por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM). Hibo y sus hijas tuvieron acceso a productos sanitarios y a espacios privados higiénicos para poder manejar su período menstrual con dignidad. Los puntos de provisión de agua y las instalaciones de saneamiento estratégicamente establecidos en todo el campamento redujeron las distancias que ellas y otras mujeres y jóvenes debían caminar a la búsqueda de agua limpia o instalaciones sanitarias.
Contar con instalaciones sanitarias seguras y separadas para hombres y mujeres en el Campamento de Danyar permite que las jóvenes de cierta edad puedan realizar su higiene personal con el debido respeto. Esta privacidad ha sido muy beneficiosa para Hibo y sus hijas, quienes dicen que tienen un espacio seguro para atender sus necesidades durante el período menstrual, sin miedo ni vergüenza.
"Venir a Danyar fue una lucha, pero los servicios de agua e higiene nos han dado un sentido de dignidad y esperanza”, explica Hibo. “Mis hijas tienen la privacidad y los productos sanitarios necesarios. Estos servicios han implicado una diferencia enorme para nosotras y nos han ayudado a sentirnos humanas otra vez”.
La OIM Somalia ha estado trabajando en campamentos de personas desplazadas internamente en Somalia, en zonas como Dollow, Luuq, Bardhere, Baidoa y Adale – brindando servicios de agua, saneamiento e higiene para todos esenciales para la higiene menstrual.
Se pudo llegar a miles de personas entre mayo de 2023 y mayo de 2024; la OIM ha distribuido kits de higiene y toallas sanitarias a casi 60.000 familias, de modo que los productos para la higiene menstrual estén al alcance de quienes pudieran necesitarlos. Casi 2.800 estructuras sanitarias se han construido para brindar espacios seguros y dignos a las mujeres y jóvenes. También se ha garantizado acceso a cursos sobre salud reproductiva, por medio de sesiones de promoción de la higiene y de concientización destinadas a casi 700.000 personas. Los servicios y la infraestructura sensibles a las necesidades de higiene menstrual son una cuerda salvavidas muy importante para las mujeres y las jóvenes que viven en contextos frágiles, incluyendo a las que están en situación de desplazamiento o en áreas que se están recuperando de los impactos climáticos y otras crisis.
“Historias como la de Hibo ponen de relieve la importancia de la gestión de la higiene menstrual en el contexto de las respuestas humanitarias, especialmente en entornos de desplazamiento en los que el acceso a recursos de esa naturaleza es con frecuencia limitado”, dijo Ahmed Abdulkadir, Oficial Nacional de Servicios WASH en la OIM Somalia. “Para Hibo y sus hijas, estos servicios han sido transformadores y les han permitido mantener su salud y dignidad incluso ante las circunstancias más apremiantes”.
Y si bien la higiene menstrual conlleva cierto estigma en Somalia y en otros países, constituye una meta fundamental para lograr los objetivos en materia de salud y bienestar establecidos en la Agenda para el Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas. Entre tales objetivos cabe mencionar el de garantizar vidas saludables y promover el bienestar de todas las personas, de todas las edades, asegurando educación de calidad inclusiva e igualitaria y logrando la igualdad de género mientras se empodera a todas las mujeres y jóvenes.
Los Servicios de Agua, Saneamiento e Higiene para Todos brindados en Somalia fueron posibles gracias al apoyo de asociados como el Banco Mundial, la Oficina de Asistencia Humanitaria (BHA) de USAID, los Gobiernos de Japón y Noruega y el Fondo Central de Socorro de Emergencia de las Naciones Unidas.