Mekelle, Tigray – “Estoy embarazada y desplazada, pero sigo con vida”, se lamenta Lete mientras se acaricia el vientre. Está esperando su control pre natal en una clínica médica móvil de la OIM en Mekelle, capital de la región de Tigray en Etiopía.
Lete es una de las más de 1.7 millones de personas desplazadas internamente (IDP por su sigla en inglés) afectadas por la crisis en el norte de Etiopía, la cual comenzó tras el estallido de violencia en la región de Tigray en noviembre de 2020.
Cuando el conflicto estalló, Lete se fue con sus tres hijos.
“Caminé 90 kilómetros con mis hijos desde mi ciudad natal Adwa, en Tigray Central. Por estar embarazada hacerlo fue verdaderamente peligroso. Estaba sola con mis hijos, tuve que dejar a mi esposo y no lo hemos visto desde entonces. A mitad del trayecto algunas personas nos ayudaron, y nos subieron a su auto para que pudiéramos llegar a Mekelle”, cuenta.
Lete es una de las cientos de personas desplazadas internamente que reciben apoyo médico de parte del Equipo Móvil de Salud y Nutrición de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), el cual se encuentra actualmente trabajando en sitios temporales de desplazamiento que con anterioridad eran escuelas. Cada día el equipo, compuesto por dos funcionarios sanitarios, dos enfermeras y dos consejeros, visita varios sitios en Mekelle.
Respuesta de la OIM en el ámbito de la salud
De acuerdo con la Matriz de Seguimiento de Desplazamiento de la OIM, más de 1.7 millones de personas han sido desplazadas internamente debido al conflicto en curso en el norte de Etiopía. Las instalaciones sanitarias se encuentran bajo una gran presión. Muchos de los desplazados, entre ellos mujeres, menores, recién nacidos y personas discapacitadas tienen necesidades básicas como las de recibir albergue y alimentos. A esto viene a agregarse el hecho de que la pandemia de COVID-19 aumenta los temores de las personas puesto que muchas de ellas están viviendo en sitios temporales atestados, con pocas instalaciones para la higiene. Las precipitaciones en curso podrían agravar aún más la situación y provocar mayor desplazamiento a causa de las inundaciones y en consecuencia generar un aumento en los casos de diarrea acuosa y malaria.
En respuesta, los Equipos Móviles de Salud y Nutrición y también los de Apoyo Psicosocial y de Salud Mental (MHPSS) están atendiendo consultas médicas, brindando servicios básicos de salud sexual y reproductiva (SRH), controles y manejo de las derivaciones para los casos de mal nutrición severa entre menores, llevando asimismo adelante actividades de promoción de la salud, incluyendo comunicación de riesgos por COVID-19 y participación de la comunidad (RCCE) en sitios para personas desplazadas internamente y en algunas clínicas no móviles.
“Desde el inicio de nuestra respuesta, hemos apoyado a más de 14.400 personas a través de la atención de consultas médicas, hemos revisado a casi 4.000 menores por casos de mal nutrición, y de esa cantidad más del 4.7% (191) casos de mal nutrición fueron identificados y derivados para ser tratados, habiéndoseles brindado asimismo servicios de MHPSS a más de 12.300 personas”, dice Carolyne Kipsang, Coordinadora Sanitaria de Emergencia de la OIM.
“Se ha podido llegar a más de 59.000 personas con mensajes claves sobre salud, por medio de actividades de promoción de la salud, y más de 1.000 mujeres han accedido a servicios SRH. La OIM también le está brindando su apoyo a la Oficina Regional de Salud con actividades de preparación para los brotes y está trabajando para desarrollar la capacidad de los trabajadores sanitarios del gobierno por medio de entrenamientos”, agregó.
Abordaje del padecimiento psicosocial por medio de actividades de MHPSS
Los servicios de MHPSS de la OIM en los campamentos para personas desplazadas en Mekelle comenzaron en febrero de 2021 con el foco en la psicoeducación, sesiones de asesoramiento individuales y familiares, primeros auxilios psicosociales, apoyo a menores no acompañados, seguimiento familiar y servicios de derivación en materia de salud mental. Este tipo de apoyo es crucial, tanto durante las emergencias como cuando las mismas han terminado, para brindar apoyo psicosocial directo y desarrollar la capacidad local para mejorar la salud mental de las personas y de las comunidades.
“Los servicios MHPSS en los campamentos han ayudado a las personas desplazadas a enfrentar las situaciones que se les presentaban. Las mantenemos calmas y las vinculamos con otros servicios, como los de salud. También hemos tenido muchos casos de psiquiatría entre las personas desplazadas internamente y la OIM ha podido asesorarlas y derivarlas para que reciban los cuidados necesarios. Actualmente tenemos 28 menores no acompañados que están siendo derivados a asociados para realizar un seguimiento familiar”, dice Edén Solomon, Consejero en MHPSS de la OIM.
La respuesta sanitaria de la OIM en el norte de Etiopía ha sido posible gracias al generoso apoyo del Gobierno de Japón.
Para más información contactar con Krizia Kaye Viray, Oficial de Prensa en la OIM Etiopía, Correo electrónico: kkviray@iom.int