Tapachula, 11 de noviembre de 2022– Cuando somos pequeños, una de las preguntas que nos suelen hacer es: “¿Cómo te llamas?”. Nuestra respuesta suele ser automática y simple. Cuando ya hemos aprendido a hablar, los nombres que nos han dado forman parte ya de nuestra identidad en todo momento y en todo lugar.
Sin embargo, para muchas familias de migrantes, la obtención de una identidad legal total y el reconocimiento de los nombres de sus hijos puede ser un camino difícil. Entre los obstáculos pueden mencionarse las barreras idiomáticas, poca o ninguna orientación en el proceso de registro civil, la necesidad de contar con una apostilla (certificación de un documento legal), y los altos costos para la obtención de otros documentos o trámites. Para muchos y muchas, el proceso es agotador.
A pesar de todas estas complejidades, 89 madres y padres extranjeros obtuvieron certificados de nacimiento en abril de este año durante el “Día de Registración para Menores Mexicanos”, con el apoyo de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) en Tapachula, la principal ciudad fronteriza al sur de México.
Una de las familias que se beneficiaron con esta iniciativa fue la de Claudio Cabral y su esposa Sandra, originarios de Angola. Habían llegado al sur de México desde América Central tres semanas antes del nacimiento de su hija.
"Mi esposa comenzó a sentirse mal cuando estábamos viniendo hacia aquí, a Tapachula. Mi hija nació prematuramente”, dijo Claudio. “Cuando llegamos recibimos el apoyo del Albergue Belén (un albergue católico para migrantes). De ahí nos fuimos al hospital”, agregó.
Mientras se encontraban en el hospital, a Claudio y su esposa le contaron acerca del procedimiento para la obtención de un certificado de nacimiento. “Era difícil para nosotros comprender qué documentos nos estaban pidiendo”, recuerda Claudio. En el albergue, el personal se contactó con la OIM para pedir ayuda y fue así como la Organización les explicó cuál era el procedimiento paso a paso para inscribir a su hija.
Sin embargo, Claudio tuvo que enfrentar otro desafío al intentar inscribir el nacimiento de su hija. Él y su esposa querían que la menor fuera inscripta con el apellido de la madre primero – tal como lo hubieran hecho en Angola.
"Los padres extranjeros generalmente no tienen un documento oficial de identidad. Esto, junto a la falta de información y otras barreras para acceder a diversos servicios, ha provocado una demora en la inscripción de menores mexicanos nacidos en el país de padres extranjeros”, dice la Coordinadora de Protección de la OIM, Yolice Quero.
Quero también explica que, en un país ubicado en uno de los más importantes corredores migratorios del mundo, la OIM ha estado trabajando en el fortalecimiento del acceso a la identidad legal para menores mexicanos de padres extranjeros en colaboración con sus contrapartes.
Por ejemplo el hecho de que los funcionarios del Registro Civil del Estado de Chiapas, en donde se encuentra Tapachula, los consulados, las autoridades de la Secretaría General del Gobierno de Chiapas y la OIM faciliten el proceso para las familias, permite que la inscripción sea mucho más sencilla.
Después de una paciente espera, Claudio y su esposa pudieron inscribir a la hija y recibieron la partida de nacimiento, habiendo logrado navegar con éxito por el complejo procedimiento con la ayuda de la OIM.
Desde mayo de 2022 la OIM ha estado promoviendo una Estrategia Mundial de Identidad Legal con el objetivo de ayudar a los Estados a que puedan cumplir con el Objetivo 4 del Pacto Mundial para una Migración Ordenada, Segura y Regular, y también con la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible (Objetivo 16, meta 16.9).
Esta historia fue escrita por Cesia Chavarría, Asistente de Comunicaciones en la OIM México.